«No es la carne y la sangre, sino el corazón lo que nos hace padres e hijos»

Así comenzaba la maravillosa charla, o más bien debería decir terturlia, que mantuvimos durante dos horas en inmejorable compañía.

Fue un espacio abierto en el que recorrimos este maravilloso camino, único para cada uno de nosotros, de la adopción. Una aventura que en ocaciones nos pone a prueba, nos hace sacar lo mejor de nosotros mismos para «tirar adelante», en otras nos desepera, nos llena de lágrimas, nos confunde, nos acoje, nos alegra, nos ilusiona… nos llena de amor.

Todos los que allí estábamos nos sentimos como «en casa» y pudimos hablar a corazón abierto sintiendo el más sincero de los apoyos por parte de cada uno de los asistentes.

Hubiéramos continuado hablando durante horas, pero el tiempo se nos echó encima y tuvimos que acabar antes de lo que nos hubiera gustado así que … ¡os esperamos en la próxima!

«Haz tiempo para todo, y todo lo que es tuyo, vendrá a tus manos en ele momento oportuno. Ghandi».