Hace un tiempo os presentamos al pequeño Gemechu, uno de los peques que asiste a nuestra escuela infantil y todo un personaje por su simpatía e ingenio. A pesar de lo dura que ha sido hasta ahora su corta vida, siendo el pequeño de 7 hermanos, huérfano de padre y con muy pocos recursos económicos, nuestro pequeño cangurito tiene la más hermosa sonrisa del mundo. Una sonrisa enorme y unos ojos muy brillantes que nos ofrece a diario y que le han hecho merecedor del pseudónimo con el que toda la familia Abay le conoce, “El niño de la eterna sonrisa”.
Hace aproximadamente un mes nos avisaron porque Gemachu se encontraba muy enfermo, había perdido peso e incluso tenía una parálisis de su mano izda. Inmediatamente organizamos su traslado a Addis para revisión médica y de esta forma llegó a la casa ISA, un centro que desde hace meses hemos puesto en funcionamiento en Addis de la mano con nuestra ONG hermana Infancia Solidaria.
Fue recibido por la enfermera que tenemos contratada allí para atender a los niños del programa de salud y que ha sido la encargada de acompañar a Gemachu y a su madre al hospital para su valoración, pruebas complementarias y tratamiento médico y fisioterápico.
Gemachu tuvo una afectación renal importante secundaria a una infección de garganta por una bacteria fácilmente tratable en nuestro medio y que por no recibir en su momento el tratamiento adecuado le ha producido graves complicaciones. Actualmente el niño se encuentra mucho mejor, su función renal se ha normalizado, no tiene fiebre, ha recuperado peso y sobre todo, ha vuelto a sonreír!!!
Una vez más la injusta desigualdad de oportunidades ha sido la responsable de que una enfermedad fácilmente tratable haya casi podido acabar con la vida de un niño. Abay e Infancia Solidaria seguirán trabajando para que desaparezcan esas desigualdades y todos los niños puedan tener acceso a la salud.
Gemachu ha vuelto a sonreír, su sonrisa es nuestra gasolina para seguir!!!
