Otro de los objetivos del grupo Abay en nuestra última visita a Walmara, fue analizar la situación en la que se encuentran los niños, y la población en general, desde el punto de vista sanitario. Para poder plantear estrategias de trabajo futuro es necesario detectar los problemas de salud más prevalentes en la zona y los recursos sanitarios disponibles, así como valorar el estado nutricional de los niños de Gaba Kemisa.
En esta ocasión, y aprovechando la presencia en el grupo de personal sanitario (médicos, enfermera, terapeuta ocupacional), hemos realizado revisiones médicas a un numeroso grupo de niños, seleccionados por los maestros de la escuela de Bacho Walmara en función de la presencia de síntomas de enfermedad o desnutrición.
En este trabajo participó activamente Motu, el enfermero contratado por Abay, recibiendo de este modo las instrucciones médicas pertinentes para poder realizar un adecuado despistaje de patologías y estableciéndose protocolos de derivación al centro sanitario de referencia en los casos que así lo requieran.
Durante nuestra estancia pudimos comprobar las enormes carencias que tiene la población desde el punto de vista sanitario. El centro sanitario, cuya ampliación y reforma realizada este año por Abay con la financiación de Infancia Solidaria, está funcionando satisfactoriamente pero aún falta mucho por andar para que funcione a pleno rendimiento. No cuenta con personal médico y por el momento únicamente nuestro capaz y voluntarioso enfermero y dos auxiliares trabajan allí, comprometiéndose las autoridades sanitarias a destinar un enfermero más para Gaba Kemisa.
En el centro se lleva a cabo la vacunación infantil de acuerdo con el calendario vacunal vigente y ya algunas mujeres han sido atendidas en el momento del parto, pero de momento la mayoría sigue alumbrando en casa.
Los medicamentos no son subvencionados, debiendo ser asumido su coste íntegramente por los pacientes, con la excepción de los tratamientos para el VIH, Malaria y Tuberculosis, como tampoco es gratuita la asistencia médica en el centro de referencia, lo cual teniendo en cuenta la falta de recursos de la población local convierte el estado de bienestar y de salud en una meta prácticamente inalcanzable, o al menos, por ahora.
Por todo esto, desde Abay vamos a seguir trabajando para conseguir mejorar las condiciones sanitarias de la población, colaborando con las autoridades locales en la medida de nuestras posibilidades, mediante el apoyo o puesta en marcha de programas como el de promoción de la salud, charlas de educación sanitaria e higiene de alimentos, prevención de VIH, Malaria y Tuberculosis y quizás en un futuro, la posible ampliación del centro polifuncional con un módulo de nutrición y enfermedades infecciosas. Para esto último nos reunimos con las autoridades sanitarias de la comarca en Holeta y les planteamos nuestra disposición a continuar ampliando las infraestructuras bajo la condición de su implicación en dotar de personal y medios con el objetivo de incrementar la cartera de servicios como en su día nos solicitaron.
