Alemayehu, campeón europeo de Cross

Alemayehu Bezabeh, atleta de 23 años nacido en Etiopía, se convirtió en el primer español que conquista el título masculino de campeon de Europa de cross.

Juan Carlos de la Ossa (tres veces), Alberto García y Alejandro Gómez habían logrado medallas de plata, pero ningún español había pesado el cajón más alto del podio en las 15 ediciones anteriores.

 Bezabeh ha confirmado su progresión batiendo por diecisiete segundos a Mo Farah Bezabeh, segundo en el cross de Atapuerca plantando cara al campeón mundial, el etíope Gebre Gebremariam, y vencedor en Quintanar, venía anunciando un gran momento de forma que ha plasmado en Dublín con una victoria impecable en cerrada pugna con el británico de origen somalí Mo Farah.

 Dos años después de que Marta Domínguez obtuviera en Toro (Zamora) el primer título continental de cross para España, Bezabeh ha confirmado su progresión batiendo por diecisiete segundos a Mo Farah y por 42 al ucraniano Sergiy Lebid, ocho veces campeón.

 

El año pasado, todavía sin consistencia, convaleciente de diversas lesiones, Bezabeh ya batió en Atapuerca al subcampeón mundial de cross, el keniano Leonard Komon, pero su debilidad estructural le pasó factura en el Europeo de Bruselas, donde cayó hasta el séptimo puesto en el último kilómetro.

Hace sólo tres años que Bezabeh llegó a Madrid como un inmigrante más, un «sin papeles» en busca de la supervivencia, hasta que le acogió la Asociación Karibu en el barrio madrileño de Delicias.

Había pasado meses durmiendo en la calle, comiendo en el Auxilio Social, hasta que Manuel Pascua le descubrió en una prueba test. Tuvo que ser sometido a exámenes radiológicos para averiguar su edad y se decidió atribuirle el primero de enero de 1989 como fecha de nacimiento.

El padre Antonio Díaz le ayudó a conseguir asilo político y, por medio de otro atleta etíope afincado en Madrid, Fidaku Bekele, entró en contacto con el club de atletismo Bikila.

Sin haber hecho ningún trabajo «profesional» previo, en siete series de cuatro minutos, con dos de recuperación, Bezabeh aguantó en aquellas pruebas el ritmo de Luis Miguel Martín Berlanas (plusmarquista español de 3.000 m. obstáculos) y de dos buenos mediofondistas, los hermanos Esteso (Pedro y Juan Carlos). Para rematar, ya solo, hizo un kilómetro en 2:33.

Su tipo longilíneo, escasamente musculado, responde al típico del corredor etíope. Tiene calidad de origen. Sólo le faltaba un entrenamiento ordenado para corregir los defectos acumulados en un año de carreras sin cuento por toda España para ganarse la vida.

El 4 de julio del 2007 el Consejo de Ministros le concedió la nacionalidad española por carta de naturaleza en atención a «circunstancias excepcionales» y debutó con la camiseta española en los 5.000 metros de los Juegos de Pekín, donde llegó a la final (undécimo).

«Será el atleta español del futuro y durante muchos años», venía advirtiendo Manuel Pascua. Es un atleta para batir el récord de España de 5.000 (13:02.54, en poder de Alberto García) y situarlo sobre 12:50. Será un valor mundialmente, pero hay que ir despacio con él y tener en cuenta que un fondista se hace a partir de los 26 años», explicaba el técnico.

Con ser un atleta de calidad, Pascua destaca su faceta humana: «Es muy trabajador, constante, tiene unos fundamentos morales importantes, sabe cuidarse y el éxito no le cambia la vida. No se pierde un entrenamiento y en competición no se asusta de nadie y hace su carrera con independencia de quienes sean sus rivales».

«Bezabeh será el mejor en dos años, batirá el récord de España de 3.000 y 5.000. Ya dije que este hombre es un talento. El año pasado estaba todavía bajo las secuelas de sus lesiones, pero ahora ha estado entrenando muy bien y le ha dejado muerto a Mo Farah, que está en la UVI».

Fuentes: marca.com y elmundo.es