Hace unos días preparando la presentación en el FNAC Valencia de la Asociación ABAY, hablamos de darle el nombre de «Vine de Etiopía», pues nos pedían que nos centráramos en la adopción, hoy leyendo este artículo, creo que estuvo acertado el nombre acordado, pues no sólo nuestros hijos tienen sus orígenes en  Etiopía, sino que parece que nosotros también.

Nuevo eslabón entre australopitecos y homínidos más primitivos

 Un fósil etíope relaciona a nuestros conocidos ancestros hombres-mono con otros aún más cercanos a los simios.

Nuevos fósiles descubiertos en el desierto de Afar, en Etiopía oriental, son un eslabón perdido entre nuestros ancestros hombres-mono de hace unos 3,5 millones de años y homínidos más primitivos que los antecedieron en un millón de años, según un equipo internacional liderado por la Universidad de California, Berkeley, y el Laboratorio Nacional de Los Álamos en Nuevo México.

Los fósiles pertenecen a la especie más primitiva de australopitecos, conocida como Australopithecus anamensis, y tienen una edad de unos 4,1 millones de años, dijo Tim White, un profesor de biología integrada de UC Berkeley y uno de los líderes del equipo.

”lugar_del_hallazgo_del_Australopithecus_anamensis”
En el lugar donde el cazador de fósiles Kampiro Kage (a la derecha) descubrió el primer canino de un Australopithecus anamensis, Tim White sostiene cuidadosamente un trozo de un diente roto.© 2005 David L. BrillBrill Atlanta

Los homínidos australopitécidos han sido llamados a menudo hombres-mono porque, aunque de corta estatura, con cerebros pequeños y grandes dientes, caminaban sobre dos piernas, a diferencia de los grandes simios.

Homínidos más primitivos aún, del genus Ardipithecus, datan de entre hace 4,4 a 7 millones de años y eran mucho más parecidos a los simios, aunque ellos también caminaban sobre dos piernas.

“Este nuevo descubrimiento cierra la brecha entre los australopitecos completamente desarrollados y las formas más primitivas que conocemos como ardipitecos”, dijo White.

Los nuevos hallazgos fósiles y un análisis del hábitat de estos homínidos, junto con su posicionamiento evolutivo, son comunicados por White y otros co-autores de Etiopía, Japón, Francia y de los EE.UU. en el número del 13 de abril de la revista Nature.

Desde que el primer cráneo australopitécido, el famoso niño de Taung, fue descubierto en Sud África hace 82 años por Raymond Dart, se han hallado fósiles de homínidos por toda África oriental, incluyendo al más primitivo, Au. anamensis, que tiene una antigüedad de 4,2 millones de años, y al Au. africanus, el descubierto por Dart. La especie más especializada, Au. boisei, desapareció hace unos 1,2 millones de años, mucho después de que el genus Homo se hubiera diseminado por todo el Viejo Mundo.

El más famoso de los fósiles australopitécidos es Lucy, un esqueleto adulto de 1,05 metros de estatura descubierto en la depresión de Afar en 1974. El equipo que lo analizó incluía a White. Clasificado después como Au. afarensis este homínido, que vivió hace entre 3,6 y 3 millones de años, fue hallado también en el área de estudio del Awash medio, donde se encontraron los nuevos fósiles del Au. anamensis.

Por otro lado, el Ardipithecus fue descubierto por White y su equipo en 1992, basado en fósiles provenientes de Aramis, una villa del Valle del Awash en el rift de Afar en Etiopía. White y su equipo denominaron a los fósiles de 4,4 millones de años Ardipithecus ramidus.

”muestras_fósiles_del_Awash_medio”
La muestra del Awash medio de fósiles del Australopithecus anamensis incluye dientes, mandíbulas superiores, huesos de la mano y del pie, fragmentos de vértebras, un fémur, y fragmentos de cráneos y mandíbulas.© 2005 David L. BrillBrill Atlanta

Sin embargo, la relación entre Australopithecus y Ardipithecus permaneció poco clara, porque había una brecha de un millón de años entre estos dos géneros. Los nuevos fósiles descubiertos, mandíbulas y dientes provenientes de ambas localidades, cierran esa brecha. Con Ardipithecus en las rocas más viejas y Au. afarensis en las rocas que estaban por encima, los nuevos hallazgos son intermedios en tiempo y en anatomía.

Los dientes cuentan una historia sobre la dieta del organismo, dijo White. Los grandes molares del Australopithecus (los antropólogos se refieren a este homínido como un megadonte, es decir, dientes grandes) le permitían subsistir con una dieta más amplia de plantas fibrosas y duras. Los dientes del Ardipithecus eran más pequeños, restringiéndolo a una dieta de alimentos menos abrasivos y duros, dijo White.

Australopithecus se convirtió en un omnívoro superior, capaz de comer tubérculos y raíces con más fibras y gravilla, adaptándolo mejor para tiempos de escasez durante períodos de sequías extensas”, dijo. “Pueden haber tenido cerebros pequeños, pero resistieron durante largo tiempo, durante la mitad de los seis millones de años de existencia de nuestra familia zoológica en el planeta”.

White y su equipo del Awash medio son cautelosos cuando declaran que los nuevos fósiles están emparentados cercanamente con el miembro más reciente del genus Ardipithecus, Ar. ramidus, ya que los dos están separados por apenas 300 000 años. Si bien Au. anamensis pudo haber evolucionado rápidamente a partir de Ar. ramidus, pueden quedar todavía por descubrir otros fósiles contemporáneos.

”Ardipithecus”
Ardipithecus

Sin embargo, dijo White, los nuevos fósiles muestran una clara descendencia del genus Ardipithecus, del cual se han identificado dos especies a lo largo de sus dos millones de años de existencia.

El hecho de que se hallan descubierto fósiles de Ar. ramidus, Au. anamensis y Au. afarensis en capas sedimentarias sucesivas en la misma área del Awash medio, indica también una secuencia evolutiva, agregó White. “Es correcto decir que alguna especie de Ardipithecus dio lugar al Australopithecus”, finalizó.

El primero de los fósiles reportados, una mandíbula superior con dientes, fue descubierto en noviembre de 1994 en Aramis, el lugar de hallazgos anteriores de Au. anamensis. En 2000, 2003 y nuevamente en enero y diciembre de 2005, el equipo descubrió dientes y fragmentos adicionales de mandíbulas en Asa Issie, a unos 10 kilómetros al oeste de Aramis.

Muchos de los dientes estaban completamente destrozados, pero tamizando con agua los sedimentos superficiales pudieron recoger casi todos los fragmentos, los cuales fueron penosamente re-armados por White.

 
Lucy

En total, en Asa Issie se recogieron los dientes y las mandíbulas de ocho individuos, todos de una edad aproximada de 4,1 millones de años, según fueron datados utilizando métodos paleomagnéticos y de argón-argón por un equipo liderado por el geólogo Paul Renne, profesor adjunto de ciencias terrestres y planetarias de UC Berkeley y director del Centro Independiente de Geocronología de Berkeley. Un fémur parcial y huesos de manos y pies eran muy similares a los huesos de Lucy, encontrados a 60 kilómetros de distancia en Hadar y que databan de hace 3 a 3,4 millones de años atrás. Los dientes grandes y de esmalte grueso fueron juzgados por el equipo de investigación como más cercanos al Au. anamensis y ancestrales de Au. afarensis.

También se descubrieron cientos de fósiles de mamíferos, lo que permitió al equipo reconstruir el hábitat como una arboleda cerrada con montones de monos colobos, kudus, cerdos, aves y roedores, así como toda una colección de carnívoros, principalmente hienas y grandes felinos.

“La abundancia de monos, kudus y otros mamíferos, así como madera petrificada encontrada tanto en Aramis como en Asa Issie demuestra que un hábitat arbolado cerrado persistió durante un largo período en esta parte de Afar, y fue un lugar visitado por homínidos primitivos hace entre 4 y 6 millones de años”, dijo Giday WoldeGabriel del Laboratorio Nacional de Los Álamos, geólogo y co-líder del proyecto Awash medio.

El equipo del Awash medio, consistente en 60 científicos de 17 países, proporcionó expertos en geología, arqueología, paleontología y biología evolutiva para el estudio de los fósiles desenterrados en Etiopía y que cubren casi 6 millones de años de evolución, desde los primeros homínidos que se separaron de los chimpancés hasta los humanos modernos, Homo sapiens sapiens. El equipo continúa desenterrando fósiles de lo que White describe como “la mejor ventana del mundo hacia la evolución humana”.

El equipo está respaldado principalmente por la Fundación Nacional de Ciencias y la rama del Laboratorio Nacional de los Álamos del Instituto Multi-sistémico de Geofísica y Física Planetaria de la Universidad de California.

”evolución_humana”

Páginas web relacionadas

— ¿Cómo funciona la evolución?

— Diseño inteligente: ¿ciencia mala o no-ciencia?

— Tibet, evolución en marcha

— Genoma del chimpancé

Traducido para Astroseti.org por
Heber Rizzo Baladán


Web Site: UC Berkeley
Artículo: “Ethiopian fossils link ape-men with earlier hominids”
Autor: Robert Sanders
Fecha: Abril 12, 2006